La Lección 4

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La Lección #04
LO QUE EL ESPÍRITU SANTO HA HECHO PARA NOSOTROS

• El versículo de memoria: Ro 8:9

• Hemos aprendido que Cristo nos ha hecho ricos. Sin embargo, debemos crecer en nuestro entendimiento de estas riquezas. Llegar a conocer al Espíritu Santo nos ayudará a llegar a estar más familiarizados con las riquezas de Cristo.
• Recuerde que es por el Espíritu Santo que nosotros recibimos las riquezas de Cristo.

• Lea Ef 1:13-14
  • Nuestra posición en Jesucristo está basada en las bendiciones del Espíritu Santo:
    • ¿Qué ha hecho por nosotros el Espíritu Santo en el pasado?
      • Es por la acción del Espíritu Santo que llegamos a ser salvos.
      • Lea Juan 16:8
        • Él convence a nuestros corazones del pecado cuando oímos el evangelio. Él nos hace sentir culpabilidad.
        • Lea Juan 15:26
        • Nos revela a Jesucristo para que lo recibamos a Él. (Ef 1:13)
        • Es por el Espíritu Santo que nos damos cuenta de que necesitamos un salvador. Entonces esa fe se enciende dentro de nosotros. Si no fuera por esa fe, nunca recibiríamos a Cristo.
        • Él da a luz a la vida de Cristo dentro de nosotros. Es el Espíritu de la vida.
    • ¿Qué hace por nosotros el Espíritu Santo en el presente?
      • Él nos ha sellado. (13)
        • Las personas de Éfeso comprendían este concepto de un “sello”. La ciudad era un centro de comercio en que las mercancías de comercio estaban selladas con un sello de cera cuando transportaban. Designaba al dueño y aseguraba que las mercancías llegaran a su destino.
        • ¿Qué significa para nosotros este sello?
          • El sello ocurre en el momento de oír y creer el evangelio.
          • Por lo tanto, cuando recibimos a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador personal, El puso una marca espiritual de posesión sobre nosotros. (1Co 6:19-20)
          • ¿Cuál es el “sello” de la promesa?
            • El sello es la presencia del Espíritu Santo dentro del creyente.
            • Lea Juan 14:16
              • Cuando nacemos de nuevo, el Espíritu Santo viene para vivir en nosotros para siempre.
              • Ahora somos la posesión de Dios. El sello significa una transacción completa. También significa que estamos seguros y protegidos. También significa que somos creyentes auténticos. (Ro 8:9)
      • Cuando estamos sellados, el Espíritu Santo está comprometido para guiarnos a la verdad y enseñarnos sobre las cosas de Dios.
        • Lea Juan 14:26 y 16:13.
          • Él nos ayuda para entender la Biblia y hace que la Biblia venga ser viva a nosotros.
          • Él subraya los versículos en la Biblia para que sepamos que Dios nos está hablando a nosotros personalmente.
        • Esto debe ser un consuelo para el creyente saber que la responsabilidad para nuestro conocimiento de Dios es del Espíritu Santo y no nuestra.
    • ¿Qué hará por nosotros el Espíritu Santo en el futuro?
      • Él nos ha dado un “depósito” o anticipo que garantiza nuestra herencia futura. (14)
      • La presencia del Espíritu Santo dentro de nosotros es una parte pequeña del cielo celestial dentro de nosotros con la garantía que hay mucho más que vendrá en la eternidad.
        • La palabra griega real significa = “un anillo de compromiso”.
        • Es una garantía de que las promesas que Dios hizo serán cumplidas.
        • No es una transacción de negocios sino una transacción de amor personal.
          • El Espíritu Santo resucitó a Jesucristo de la muerte (Ro 8:11), y Él nos resucitará de la muerte y nos dará un nuevo cuerpo glorificado.
          • Lea Juan 16:14-15.
            • Recuerde que estamos sellados y llegaremos a nuestro destino como las mercancías de comercio selladas con cera.
            • (Note que Juan 16:15 dice que el Espíritu Santo nos mostrará las riquezas de Dios.)
• Aplicación:
  • Únicamente en estos primeros versículos del capítulo uno, hemos visto una abundancia de las riquezas que Dios ha proporcionado para nosotros. Todas estas riquezas vienen a nosotros por las acciones de la Santa Trinidad a través de las tres dimensiones del tiempo: el pasado, el presente, y el futuro.
    • Dios planeó la iglesia de creyentes, Jesucristo pagó el precio para comprar la iglesia, y el Espíritu Santo protege la iglesia.
    • Fuimos liberados del poder del pecado cuando nacimos de nuevo (el pasado).
    • Somos liberados de la presencia del pecado día por día (el presente).
    • Seremos liberados del castigo del pecado por toda la eternidad (el futuro).
  • Aprendemos:
    • Las riquezas verdaderas vienen de Dios. Los tres miembros de la Santa Trinidad están trabajando para hacernos ricos, en el pasado, en el presente, y en el futuro.
    • Todas nuestras riquezas vienen por la gracia de Dios. Los versículos 6, 12, y 14 nos dicen que Dios nos da todas estas cosas para Su gloria.
    • Todas estas riquezas son recibidas por fe.
      • Todas las cosas que vienen de Dios son dadas por Dios por medio de la gracia y recibidas por nosotros por medio de la fe.
      • Estas riquezas son solo el principio de las riquezas de Dios de las que todas son planeadas por Dios, el Padre, compradas por Jesucristo, el Hijo, y presentadas por el Espíritu Santo.
  • Pregunta para discusión:
    • Si el Espíritu Santo es responsable de nuestro conocimiento acerca de Dios y nuestra madurez, ¿por qué algunos cristianos nunca maduran en su conocimiento de Dios?

LA TAREA
EFESIOS 1:15-23
Este es un estudio de sí mismo. Por favor no envie las respuestas de la tarea a lamaestra para la corrección.

• Aplicación de Ef 1:1-14
  • ¿Cómo cambia su actitud de vida sabiendo lo que Dios, el Padre, ha hecho para usted en el pasado, en el presente, y en el futuro?

• ¿Cómo cambia su actitud de vida sabiendo lo que Jesucristo, el Hijo, ha hecho para usted en el pasado, en el presente, y en el futuro?

• ¿Cómo cambia su actitud de vida sabiendo lo que el Espíritu Santo ha hecho para usted en el pasado, en el presente, y en el futuro?

• La preparación para Ef 1:25-23
  • Lea Ef 1:15-23 la oración de Pablo
    • Haga una lista de las cosas que Pablo pidió a Dios en el nombre de sus lectores.

Aprenda de memoria: Ef 1:18